Segidores en Google

martes, 15 de abril de 2014

La Lotería del corredor

 Cada cabeza es un mundo, cada par de piernas un vehículo que nos transporta a donde queramos. Cada corredor en su vida cotidiana se encarga con propósito o no de mostrarle a los demás, que el deporte es bueno, que correr les ayuda, que les funciona y su bienestar tratan de transmitirlo; se lo propongan o no lo transmiten.
En esta carta de lotería, tenemos a la Chica Poderosa (Leslie Valladares), ella es un claro ejemplo de esfuerzo constante, da clases de zumba, hace gym, corre maratones, ultras, y siempre sonriente consigue simplemente contagiar con su entusiasmo para que otros también hagan por lo menos un poco por si mismos.


Algunos tienen otras características, y al menos puedo decir que lo siguiente es lo que percibo de ellos.
El Cazador (Fermín Mendivil) siempre me dice que trata de alcanzarme, que me persigue (me llama venadito), y si, me ha superado alguna vez, pero saber que viene atrás me impulsa a mover mis pies mas rápido.


El Inspirador.- A su edad Memín Godínez sorprende haciendo muy buenas marcas, y es que pocos a sus 69 años pueden presumir de poder correr 10k en 42 minutos. En verdad que inspira lo que aun puede lograr; y pensar que hay señores mucho menores que el que me han dicho "Yo cuando era joven como tu también corría", habría que responderles: "¿Y tu porque dejaste de correr?.


El Paticleto.- El como muchos (Heriberto Rodarte) no se limita a correr, aunque esta sea su disciplina favorita, también practica ciclismo. Por tal combinación o "cross training" a mejorado rápidamente como corredor y ya corre 10k en menos de 39 minutos. Su debut en maratón ha sido muy bueno, consiguiendo 3:36 hrs. en Mexicali 2013.


El Mosco, en realidad es el apodo de Héctor Romero, pero su agilidad y ligereza lo hace volar en las competencias (¿de ahí vendrá ese apodo?). Da buena batalla en cada carrera y entrenar duro para el es parte fundamental en su estilo de vida. Así se forman los campeones.


La Enérgica por ejemplo, derrocha en verdad energía siempre que puede en constantes carreras, ya sean cortas o largas, y a quien conozco aunque sea poco (Ninfa Uribe) es así, incluso tiene su grito eufórico personal para dar mas de lo que por si ya está dando.


El Tragamillas.- Ignacio Zamarrón, devora el calendario de carreras, no importa que ya no quepa una camiseta mas en sus cajones. No le importa el lugar de llegada, el chiste es correr y seguir corriendo, hacerlo por gusto, por cuidar su salud y sobre todo por darle el ejemplo a su familia.




El Pacer loco.- No es que a eso se dedique, pero al cuestionarle, me dijo que como corredor se considera loco... pues loco o no, yo lo usé de pacer en un medio maratón, y como me funcionó esa vez y se lo dije... aunque después no le aguanté el paso en la segunda mitad del recorrido, espero se repita.


La Chica Dinámica, es una mujer activa (como Yoana Díaz), corre y aníma a otros a que lo hagan predicando con el ejemplo, sabe que verse y sentirse bien son resultados de la actividad física. A ella no solo le gusta correr, sino que también le da gusto ver que otros lo hagan.


El Maratonista (Sergio Rodríguez), tiene tanto gusto por correr que prefiere que ese gusto le dure y que su gran esfuerzo sea compensado... al menos por la gran satisfacción de terminar. Y es que el no corre en carreras cortas o al menos no le interesan mucho, su gusto personal son los maratones.


El Puma, es el apodo del corredor Víctor Serna, también es depredador como el cazador, es competitivo y persigue a otros para superarlos. Sobra decir que le queda el apodo por su personalidad aunque el lo utilice para apoyar a su equipo favorito de fútbol.


La Campeona.- Bailadora de corazón, Lupita Cruz, corre dando siempre lo mejor, no se reserva nada. Se enfoca en su esfuerzo, en su forma, en no aflojar el paso... consiguiendo muchas veces el primer lugar femenil.


El Milusos.- Germán Rodríguez Sr. es un "todólogo" admirable, hace de todo, escribe en su web, en su artículo deportivo del periódico, es músico, toca y canta en su grupo y además de atender a su familia... Corre y practica varias disciplinas del atletismo!


El Saludable.- Fomenta su estilo de vida deportivo en cada oportunidad (Ricardo Castillo), disfruta sobre todo de correr en lugares cercanos a la naturaleza. No compite mucho, porque lo hace mas por salud que por cualquier otra cosa, pero siempre hace evidente lo bien que se siente e invita a otros a practicar la carrera.


El Incansable.- Luis Morúa, lo nombro así porque definitivamente su apetito por correr grandes distancias crece y crece entre mas corre. Ultras y maratones son sus favoritos, pero igual no perdona carreras menores a los 21K. Interesante es que ha contagiado a sus hijos con sus buenos hábitos.


La Chica fotógrafa es en este caso Isabel Granados. Entrenada por el Mosco, no pudo resistirse a ser corredora aunque es excelente tomando fotos a los corredores. Claro, es mas que eso, madre de familia, empleada y se da su tiempo para sus hobbies saludables.


Y como ellos, por suerte hay muchos mas. Aunque la lotería es un juego de azar, aquí todos consiguen hacer que ganes con sus ejemplos, donde todos podemos aprender un poco de los demás.  Es hora de jugar, de jugar para ganar!!.




miércoles, 9 de abril de 2014

Bizarra final de 10 mil metros

 Era la final olímpica del 2004 de los 10 mil metros planos, y era en Atenas, siempre quise ir a Grecia.
Una de las mejores pruebas que podemos esperar ver en cuanto a resistencia con velocidad. Haile estaba presente, razón para que el mundo estuviera a la expectativa para ver el desempeño de este gran campeón rompe-récords, además de ser el campeón a vencer por las medallas de oro conseguidas en las dos olimpiadas anteriores (Atlanta y Sidney). 
Los 24 corredores daban vueltas y vueltas a paso vertiginoso en cada lap; 14 africanos incluidos, conformando un solo pelotón; un español y dos mexicanos también iban en el. De pronto como si hubiera un eclipse lunar o algo así, el día se comenzó a volver de noche. El estadio estaba lleno, obvio, pero la gente emitía sonidos grotescos y movimientos toscos. Yo sentado desde arriba de las gradas lo veía todo. Había poca iluminación gracias a los postes de luz. Algunos corredores parecían salidos del video Thriller de Michael Jackson, eran zombies o lucían como tal, el público completo lucía como una gran legión de zombies, ¿pues que carrera es esta?, ¿en que se está convirtiendo?, me preguntaba asustado.


Tres corredores abandonaron, no se si porque se asustaron o por no poder aguantar el paso del grupo puntero que ahora ya se dividía en dos. Kenenisa Bekele iba muy fuerte, intercambiando el primer lugar con un compatriota y otro mas de Eritrea. Los punteros parecían huir del grupo de persecución ya que estos con sus escasas ropas desgarradas tenían sin duda un aspecto de zombies con todo y sus grandes ojeras.

 Seguía siendo como de noche; que final mas extraña estaba presenciando, tenía ganas de verme a un espejo para ver si acaso yo mismo lucía igual al resto.
Me acerqué lo mas que pude para ver la carrera de cerca y oh! sorpresa, los mexicanos como verdaderos aztecas, solo portaban un taparrabo rojo y una especie de máscara que tenía un plumaje verde cayendo hacia atrás, de improviso se salieron de la pista y les dio por escalar una pared, al minuto y medio regresaron. Y, en medio de la pista había lodo, algunos corredores zombies los siguieron y todos tuvieron que chapotear unos 50 metros, ahora lucían simpáticos llenos de lodo, pero al salir  y querer incorporarse al grupo que iba fuerte por las medallas, éste ya les llevaba gran ventaja. 
No daba  crédito a lo que veía, y el asunto empeoró, como la oscuridad prevalecía, la gente del público que al parecer ya se había quitado el disfraz, ahora tenían luces de neón por todos lados, colores brillantes y fosforecentes adornaron el estadio.


 Haile procuraba no distraerse, Boniface y Zersenay iban pegados a el, y ya restaban pocas vueltas. Algunos atrás no se resistieron a tomar del suelo las pulseras que estaban encendidas con luminosos colores verdes, naranjas y amarillo, y se las pusieron. Eso les restó segundos, pero al menos parecían divertirse. Lo malo es que el lodo que habían dejado el japonés, un marroquí y los dos mexicanos sobre la pista volvieron peligrosa la superficie de la misma, sobre todo por la gran velocidad que manejaban los que si se estaban esforzando por obtener el podio olímpico. Dos o tres resbalaron, pero al ser tan buenos atletas no cayeron al suelo demostrando excelentes reflejos y equilibrio.
¿Que clase de boicot es este?, pensé, y es que la gente que no corría, osea el público presente ahora comenzaba a lanzar polvos, pero de todos colores, sobre ellos mismos, en sus caras y hacia los corredores que seguían fuertes en sus carriles. Yo no quise participar, fui un mudo testigo, tan solo quería admirar la impresionante técnica de los atletas. 

El español y un francés se empezaron a quedar, cuando los punteros apretaron el paso, eso era lo que quería ver, aunque de repente las lucecitas encendidas por todos lados me distraían. Creo que hasta ese momento yo pasaba desapercibido, pues como que no encajaba dentro de las tribunas... menos mal!.
Vamos Haileee!, "exclamé", seria fantástico que lo lograra por tercer olimpiada consecutiva. El top 5 iba muy fuerte y algo despegado del resto de los competidores. Los de Etiopía iban con todo. Entonces la campana anunció el último lap... vamos Haile que no te dejen!... en eso mas polvo de color salió volando por todos lados, algunos ya celebraban antes de tiempo, no lo sé... Haile se tallaba los ojos, creo que algún polvo le cayó en un instante clave y veía borroso, y si, pues iba manchada su cara de rojo, azul y amarillo... iba en tercero, "bronce por lo menos puedes lograr"... noooo, ya va en cuarto... ya están llegando a la meta, oooh! ha llegado en quinto lugar, NO PUEDE SEEEER!!, grité tan fuerte, que aunque me dio gusto que el joven Bekele ganara, sentí tristeza por Haile Gebrselassie por apenas conseguir el quinto sitio y quedar fuera del medallero.
Aquel fuerte "No puede ser" consiguió que ahora si llamara la atención de mucha gente del público, que de nuevo lucían todos como muertos vivientes, pero a la vez pintados de colores, que de ser brillantes se fueron tornando en tonos oscuros. En sus sonrisas malévolas y miradas perdidas pude ver las negras intenciones, con polvos de colores en mano me perseguían, yo corrí a buscar una salida con mi corazón todo agitado... "No, no me harán lo mismo, a mi noooo!".

Ah caray!, ¿que fue todo eso?, y desperté con mis piernas que casi colgaban fuera de la cama. Que loco sueño acabo de tener. Tan solo fue una especie de pesadilla. Menos mal que a esos competidores en la vida real no les sucedió exactamente así... uff!.
Se que divertirse de vez en cuando no está de mas, pero no me gustó que mi octavo lugar en la lucky run pasara desapercibido; se que no hubiera asistido si no fuera porque me regalaron la inscripción, y porque lo que tenía era muchas ganas de correr y de hacerlo de noche, pero mejor creo que seguiré mi línea, la de las carreras tradicionales.

Con admiración y respeto a todos esos "corredores reales", los que me inspiran a dar lo mejor de mi!.  



Aqui participé en la carrera temática de 5k  Lucky Run, donde todos usamos luces de neón.






martes, 1 de abril de 2014

25 K. BAJA TRAIL- EXPERIENCIA PERSONAL

LA EXPERIENCIA  DE VICTOR SERNA



30 de Marzo de 2014. Rancho Casián, Tijuana.

Anuncian la salida pasadito de las siete de la mañana, todos los corredores en la meta ansiosos, tal vez otros un poco nerviosos por desconocer la ruta o por ser su primera vez en este tipo de eventos. Corredores de varias partes del país y extranjeros, todos con solo dos objetivos: conquistar 25 o 50 kms. 




 Finalmente ahí vamos, todos juntos con gritos de júbilo y emoción. Poco más de 300 corredores estábamos en el mismo camino. No tardó mucho en dispersarse el grupo, los que iban por 25 kms. tomaron la delantera y los de 50 km a un paso más conservador,  pues había que administrarse muy bien si querían cumplir con tan demandante distancia.
Yo, que solo iba por los 25 kms. decidí irme a paso más lento junto con mi hermano aunque el iba por los 50K.  Nos iríamos juntos hasta el km 13 que era donde yo me regresaría y el seguiría hasta el km 25, donde sería su regreso.
 Me di la oportunidad de irle tomando algunas fotos y videos ya que en ciertos puntos del camino se podían observar unas panorámicas muy bonitas; que más que el guarde un bonito recuerdo de su primer ultra. Por ciertos tramos nos distanciamos un poco ya que sin querer me ganaban las ganas de ir más rápido, después nos volvíamos a encontrar.

Llegué al primer abastecimiento, solo un trago de agua fue suficiente para poder seguir sin problemas, no hubo necesidad de rellenar mis ánforas, todavía en una tenía agua y en la otra electrolitos, suficiente para poder llegar al siguiente punto de hidratación, el clima se estaba portando muy bien con nosotros.
Fue más adelante donde en una prolongada curva mi pie derecho tropieza con un pequeño tronco que salía unos 5 cm de la tierra, ahhhhhhhhh!!!!!, fue el grito cuando iba cayendo, fui a parar unos metros adelante, tenía la tierra muy cerca de mi cara, mi mano derecha había dibujado un caminito desde que toco la tierra hasta donde finalmente paro, y mi rodilla en un par de ocasiones sintió lo duro de ese camino. Fue una caída muy aparatosa, sentí que algo más grave me pasaría pero me levanté enseguida y seguí corriendo, al parecer todos los huesos estaban en su debido lugar, había algo de sangre en la rodilla pero eso que importaba. Los corredores, el que iba adelante y el de atrás, no me vieron cuando caí, pero con el ruido que hice se pudieron dar cuenta de lo que me había sucedido a lo que me preguntaron: ¿todo bien?, y yo con una risa les contesté: todo bien gracias, vamos!!! Jejeje me estaba riendo de mí mismo, hacía tiempo que no me caía tan bonito.


Seguí corriendo, para mi sorpresa ya venía el primer corredor de regreso (en los 25 km) y me dije ya no falta mucho para llegar al km 13 y poder regresar. Después vi pasar a Héctor Romero "el mosco", que iba a muy buen paso intentando dar alcance al primer lugar, finalmente no lo pudo lograr pero un segundo lugar es muy bueno.
Faltando unos metros para llegar a los 13 kms. y tomar el regreso, en un crucero, un corredor venía por un camino equivocado y nos pregunta: “¿voy bien?, ¿es por aquí?”, a lo que le contestamos: “No señor, usted tiene que regresar y retomar el camino y tiene que dar la vuelta hasta allá donde van esos corredores”.  El señor nos da las gracias y se regresa a retomar el camino correcto. El corredor que iba delante de mí me dice: “mira tu hermano ya va tras el señor que se había equivocado”, me regresé al crucero y le grité a Oscar que ése no era su camino que era por acá por donde nosotros íbamos, pero no me hizo caso y con una seña me dijo que él estaba bien, que su camino era por ahí……ufff ¿pues que más hago? Me quedé un rato viendo cómo se alejaba de la ruta. Finalmente lo dejé, tal vez él quería correr dos kms. más que todos, o sea 52 kms. pues ya iba de regreso a dar otra vuelta por el mismo camino que ya había recorrido, o tal vez el pensó: “si no gano en tiempo, si les voy a ganar en hacer más distancia”, lo malo es que no había premio para el que recorriera mayor distancia, jejejeje!

Unos minutos más tarde, llegué al km 13, donde estaba el segundo punto de hidratación, me tomé un descanso de 2 mins. planeando mi regreso, quería hacer mi máximo esfuerzo, quería ver que tan rápido podía ir en esos caminos. Tenía ganas de probar un poco más de velocidad en esas pendientes y en las pocas rectas que había. La sangre en mi rodilla se había detenido y no había dolor del que preocuparse. Entonces, reviso mis agujetas, ajusto mi cinturón de hidratación, un pedazo de sandía y un trago de agua y ahí voy de regreso, dispuesto a dar el máximo, ya más confiado de haber conocido ese camino.
Los primeros kms. fue algo difícil agarrar la velocidad deseada ya que me encontraba con muchos corredores en sentido contrario (que eran la mayoría los que iban por los 50 kms. por ir con una paso más lento) y el camino solo se prestaba para una persona, así que cada que encontraba corredores me hacía a un lado cediéndoles el paso y echándoles porras, ellos también aplaudían mi esfuerzo y me animaron mucho y eso se los agradezco bastante.



Unos kms. más adelante, ya estaba más libre el camino y me dispuse a apretar el paso. Me animé mucho cuando un corredor que encontré me dijo: “lugar 32”. A lo que le di las gracias por tomarse el esfuerzo de ir contando a los corredores. Lugar 32 no estaba nada mal, tomando en cuenta que la primer mitad la había hecho a un ritmo muy cómodo hasta cierto punto, incluso parando a tomar fotos y videos. Vi a lo lejos a los corredores que iban delante de mí y me dispuse a alcanzarlos, pensé que podía entrar hasta el lugar 20 si fuera posible, claro, si se puede!!!!. Entonces aceleré el paso y allá voy,... si allá voy al suelo nuevamente, no puede ser, esta vez fue el pie izquierdo el que tropezó. Ahora solo caí de rodillas y pude poner las dos manos en el piso. Ahí quedaron marcadas mis manos en la tierra, estaba dejando huella en el Casián, no solo con los pies sino también con las manos, ya solo faltó que con mi dedo escribiera “Víctor was here” . 
Esta vez me costó levantarme ya que un dedo del pie me dolía demasiado y no pasaba ningún corredor que me ayudara. Al final me levanté e intenté trotar pero el dolor ya no me dejó, mi dedo se estaba hinchando y dolía mucho.
Faltaban más o menos 2 kms. para el siguiente abastecimiento y 7k para llegar a la meta y yo ahí en pleno cerro caminando. Todo mi plan de correr más rápido se había venido abajo, no podía ni trotar bien. Fueron 2 kms. de caminar y trotar según como aguantara el dolor. Vi como en ese  lapso me pasaron varios corredores, los iba contando para saber el lugar en el que iba quedando por si me recuperaba y pudiera apretar nuevamente, así sabría en qué lugar estaba posicionado, pero el dolor nunca se fue  y me olvidé de quedar en mejor lugar. 

Víctor Puma, resguardado por los de su especie.

Llegué al último abastecimiento y ahí descansé un poco; una muchacha me ofreció agua para lavar mi herida, y me preguntó que si necesitaba algo más, creo me veían que ya estaba mal físicamente.
Me mentalicé para recorrer los últimos 5k que faltaban a paso lento y trote, si mi pie me lo permitía, tenía la esperanza de que el dolor cediera pero nunca sucedió, así que a como diera lugar tenía que llegar.
Por ahí entre las bajadas y subidas escuché un grito detrás de mí, me detuve pero no vi a nadie, pensé: “tal vez alguien ya se cayó” y veo que más abajo se levanta un señor, efectivamente se había caído. Cuando lo vi que empezó a correr me di cuenta que no había sido de gravedad su caída, luego en pocos minutos pudo rebasarme.

 Ya faltando cerca de 3 kms. para llegar entramos a una prolongada pendiente, una bajada muy larga, estaba prácticamente solo, el siguiente perseguidor venía unos 600 mts. detrás de mí y era una mujer, que al igual escuché su quejido cuando se cayó, cuando me detuve para ver,  ella ya se estaba levantando. Ya faltando 2 kms. para la meta se me acercaba otra muchacha de Mexicali y de repente suelo!!!!!! También le tocó resbalarse y caer. ¿Si estos fueron los que me tocó ver caer, a cuantos más les pasaría lo mismo?
Entré a la recta final, unos metros para cruzar la meta, ya no había nada que hacer, lo hecho, hecho estaba, solo era cuestión de segundos para terminar los 25 accidentados y divertidos kms.
Crucé la meta y me entregan mi medalla, una bonita medalla con un gran significado.


Un nuevo reto se había cumplido, no como lo había planeado pero al final orgulloso de haberlo superado a pesar de los obstáculos que se me presentaron. Tuve que verle el lado positivo y divertido a todo esto.
Nos vemos el siguiente año, y espero ahora si ir por los 50 kms.  Ah!, y también ahora si prometo inscribirme con tiempo.



Narrado por: Víctor "puma" Serna.

Fotos: Isabel Granados, Susana Susy.









En la Carrera Alba Roja 2014



30 de marzo de 2014





 Algo mal: Llegar tarde a la carrera, veinte minutos antes, confiado de encontrar parking de inmediato y nada. Hasta dentro de plaza Galerías Hipódromo tuve que ir.
Consecuencias de llegar tarde:  me inscribí y me quedaban 15 minutos o menos. A calentar lo que se podía. A subir y bajar las escaleras de la plaza; Nacho Zamarrón, un buen amigo corredor me acompañaba y creo le gustó calentar de esa manera.
Muy poco, casi nula cantidad de estiramientos pues ya todos estaban listos para la salida. Me di cuenta que algo no andaba muy bien, mi cuerpo algo adormecido todavía tal vez, me faltaba mas oxigenación, y claro me afectó el haber llegado tarde.
¿Cuanto quiero hacer?...mmm, entre 20 y 20:30 minutos.
En unos cuantos metros me dí cuenta que me estaba costando mucho esfuerzo manejar un paso fuerte, y buenos indicadores de eso fueron: primero, la ligera subida hacia el km.1 (si algo entreno son cuestas), y en segundo, ver que no podía con el paso de otros a los que les gano casi siempre. No iba tan mal, iba ligeramente debajo de 4:00' por km. sin embargo mi paso planeado sería el de 3:45'... pues no!.
Mas cuestas una vez que se deja atrás el famoso estadio caliente. Definitivamente me daba cuenta que no había llegado al cien, vaya ni al 90 o menos. Un año antes había terminado con 20:56 minutos el recorrido de los 5.250 kms. Una ruta nada sencilla si la quieres hacer a velocidad.


Fotos: Cortesía de Yo también corro en Tijuana.



Otro posible error:  Corrí 16 kms. apenas el viernes a paso "medio fuerte", ¿será que eso me desgastó?, ¿Será que no debí trotar en cerro el sábado? (un día antes de la carrera), ¿será que debemos escuchar a nuestro cuerpo y darle mas descanso y en ocasiones nos hacemos de oídos sordos y no le damos ese descanso que merece?. Es posible.

El prolongado descenso por el bulevar Las Américas me sirvió para mantener un paso fuerte, promedio de 4:00' por km. aunque de bajada iba como a 3:40' mins. en realidad me sentía lento, pues también he entrenado muy bien en bajadas, de modo que puedo manejar 3:00' cuando me siento bien.
Pensé: "que bueno que no pude correr los 25 kms. donde algunos amigos hoy están participando, pues sintiéndome tan regular me hubiera costado muchísimo esfuerzo". Soy algo orgulloso en este aspecto, pues no entro a carreras para caminarlas, correr es lo que me gusta!.


Con Ignacio Zamarrón, portando las bonitas camisetas de la carrera.


 Menos de un kilómetro para llegar y veo mi reloj, no se si voy bien o mal, si llegaré muy atrasado con respecto a mi anterior participación, pero sigo con ganas, con lo que puedo dar este día... pensar que en la carrera de Lucky Run de una semana antes me sentí mucho mas fuerte, entero, como quisiera sentirme siempre en cada carrera. Pero éste reto siempre resulta mucho mas complicado. Carrera que corro un año si y otro no, no me tocaba participar y ahí estaba sudando bonito. 



Carlos de los Angeles Jr. con buena racha, gana por primera vez esta carrera.

Resultado satisfactorio:
Bajé el paso desde antes de llegar a la rampita para entrar al hipódromo y ahí estaba ya la línea de meta, adelantada algunos 50 metros de como siempre la colocan. Mi llegada fue #60, (fui 52 en el 2013) y en un buen tiempo de 21:10 minutos (20:56 en el 2013), tan curioso me pareció, quedar a 14 segundos de mi anterior marca sin estar al cien. No siempre se puede, y nunca sabemos como vamos a amanecer, pero si ya estamos ahí hay que dar lo mejor de lo que tenemos. ANIMOOOO!!!





Archivo del blog