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viernes, 28 de febrero de 2014

Corriendo bajo la lluvia

 Pronóstico de lluvias para cuatro días. Un medio maratón en puerta. Últimos entrenamientos para decidir si asistir o no, dependiendo de los resultados. ¿Podré hacerlos con la lluvia?.




 Hoy viernes se esperan lluvias mas fuertes, chubascos dicen las noticias, y decidí dejar mi día de descanso total para el sábado, así hago mi distancia larga en domingo... claro, deberé buscar un momento del día en que la lluvia no esté muy fuerte, y buscando una ruta pavimentada para no resbalar en fangos. 
Un descanso activo no esta mal, unos 4 kms. a buen trote, para relajar las piernas por los entrenamientos duros de los días pasados; para sacar el "golpeteo" dicen algunos de mis amigos, o lo que es lo mismo para deshacerse del ácido láctico que se queda en los músculos y provoca que te duelan un poco. 
Gorra, una camiseta sin mangas debajo de otra de manga larga dry-fit, pero me di cuenta apenas comencé, que no hacia frío en realidad; la gente pasaba por las banquetas con sus buenas chamarras bien puestas, es que se supone que hace frío, es invierno, pero nada, estábamos a 16 grados centígrados, simplemente fresco, de manera que apenas dos kms. ya no aguanté y me quité la camisa manga larga y solo me quedé con la de abajo, así sí, muy rico que se sentía el viento mientras el cuerpo se iba calentando. Solo pavimento y banquetas a paso tranquilo. La lluvia caía lentamente. Calle hacia abajo para ir por 5 kms. Cielo semioscuro con amenazantes nubes, buen clima.
 No faltaba quien corría de un lugar a otro para no mojarse con la "llovizna", yo pensaba: "Han de creer que yo estoy loco o que es mucho amor al deporte para hacer esto con lluvia", además "no soy de chocolate, no me voy a derretir con una mojadita", cosas que me digo solo para darme ánimos, pero no los necesitaba, el olor a tierra y calle mojada era alentador, pero sobre todo cuando pasé debajo de unos árboles frondosos, el aroma que despiden cuando están mojados es... otro mundo!. Es parte del chiste de correr con lluvia, el de llenarte de agradables sensaciones, diferentes, que no se dan cuando corres con otros climas.



 Un señor esperando transporte me dice: "¿Así cual sudor verdad?", le contesté sonriendo que tenía razón. A los dos minutos un ancianito caminaba y me dijo al verme pasar: "Muy bien, que frio ni que nada", que gusto me dio el oirle decir eso, "No, así nada de frío", le dije.
Mas animado mejor me fui hacia el tercer km. para regresarme y completar seis en total.
De regreso ya era subida, pero a paso tranquilo. Mas gente se me quedaba viendo. Espero hayan pensado cosas positivas de mi... aunque siendo honesto no espero nada, aunque no deja de dar uno el ejemplo de salir a ejercitarse lo quieras o no.
Ya casi por llegar a casa y la lluvia se suelta fuerte por un buen rato, me quito la gorra para sentir el agua caer sobre mi cabeza y cara, sudor mezclandose con lluvia. El descanso activo estaba hecho y disfrutado, que mas da mojar los tenis y meterlos a los charcos, mi par de amigos también merecen un poco de variedad.

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Recomendaciones:

Lo que me diría mi papá: Si la temperatura es muy baja y sales a correr con lluvia, vete mas abrigado, pants en vez de short, con camiseta debajo, sudadera o rompe-vientos de ser necesario.
Si saliste porque la lluvia se calmó y quieres aprovechar, buena idea, pero ten en cuenta y hazte a la idea de que te puedes mojar en cualquier momento, de repente se suelta la lluvia, o te pasa un auto a un lado y te echa encima el agua de un charco, todo puede pasar. 
Si se pronostica granizo, hay que cuidarse de ellos, ya que a veces vienen en buen tamaño y ya puedes imaginar la golpiza.
Si por otro lado, es una tormenta eléctrica, con esta hay que tener mayor precaución, ya que los rayos son de temerse. Si acaso vas caminando o corriendo en esas condiciones, toma en cuenta que los rayos buscan un conducto para aterrizar, es electricidad que puede buscar antenas sobre las casas o árboles, y si fueras por un lugar desolado sin árbol alguno, el conducto podrías ser tu, evita serlo, o mejor evita correr bajo estas condiciones por muy extremo que te consideres... correr y salud son sinónimos, hay que cuidarnos, ánimo y no dejes de moverte! 





jueves, 6 de febrero de 2014

Corriendo con C de Conquista




Consumida cafeína, calzado caro con cordones centelleantes, Carlos Curiel corredor comprometido, concentrado comenzaba. Con cachucha cómoda café, combinada con camiseta corta, ceñida, cabizbajo cavilaba, como convenciéndose.

Complacido corría caminos cortos, cruzándo coloridas callejas; calentaba cauteloso cifrándo cuadras cuando coincidió con Cecilia Cifuentes, célibe, carismática ciclista, corredora consumada, con cabello crespo, cuerpecillo curvilíneo; cansada, caminaba contenta, celebrando con coraje cuantiosas calorías calculadas con cinco cuestas cronometradas.

Carlos creyó correcto congratularla cordialmente. Cecilia consideraba cómico coincidir cada catorcena con Carlos, cual cortés caballero con corazón combatiente, contaba cuentos con climas calientes con cielos claros citadinos, competencias con copiosos cierres cardiacos, coleccionando colosales carreras, careciendo calambres, coronándose campeón consecutivamente. 

─¡Caramba!, cero cohibido, canijo Carlos ─creía Cecilia, cuestionándose cada cuento, casualmente cargados con carreras con colinas circundantes, clubes concurridos... Citando cualquier ciudad cosmopolita.

Considerándose correoso corcel,  comentó Carlos como corría calzadas con centígrados calurosos. Creyéndose coyote copeaba cerros con cuestas crecientes, conviviendo con cascabeleantes culebras... ¡Caray, cómo contaba cosas!

Cecilia conocedora "con callo", convidaba cuestiones contrarias, confirmándole cómo cuidarse comiendo cosas cítricas, cómo competir, conservando cadencias, cómo conducirse contra calles colmadas con coches contaminantes, camioneros cafres, caprichosos, contra constantes curvas, comparando cursos caóticos contra calmadas campiñas.

─Corre cultivado, corre controlado compañero ─comentó, concluyendo contagiosa conversación.

─¡Cambujo, coqueto!, condenado corderito ─comentó Carlos con congoja.
¿Cuál caballo?, ¿cuál coyote, ciervito come-cespeds? ¿Cuál cita conseguí? ¿Cómo conquistarla?,  ¿con cine costumbrista, con comedia, con cine castástrofe comercial?  Conquistarla... ¿Cenando caviar con Coors? ¿Cabrito con Coronas? ¿Compatibilizaré con cervezas?   ─criticándose cuchicheaba. 
Culminó callado como cautivado, contemplándola cuando Cecilia caminaba con contoneante cadera.

Cecilia casi con certeza confiaba compartir ciertas cursilerías con Carlos. 
Carlos, cretino, cateto, cual coqueto cabestro ¿Cómo conseguiría conquistarla?: 

─Cuando corras conmigo, cotorro Carlitos, cuando cambies creído carácter con convenientes carreras conmigo ─conjeturaba.

Como cotidiana costumbre, caminó costeando cálidas calles,  coreando cánticos cual celestial criatura.








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