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lunes, 8 de junio de 2015

Entrena ambos: Cuerpo y Mente


Caso # 1


Este señor corría a diario ─espero que aun lo haga─ sobre un corto circuito pavimentado y totalmente plano. Nos saludábamos en cada ocasión que coincidíamos, yo corría por la ruta larga de tierra (aunque no siempre iba a entrenar a ese lugar) y podía verlo en cada vuelta, siempre al mismo paso, siempre dándole duro al pavimento. Nunca me atreví a aconsejarle algo, siempre he creído que predicar con el ejemplo es mejor que ponerme a dar consejos a alguien que no los pide.

¿Y a  mi que me importa?, que él haga lo que quiera... pero, por años me tocó verlo repetir esa monótona rutina, además de que en las carreras largas en las que participaba los fines de semana, verlo llegar tan amolado a la meta era el comprobante de que no había llevado un buen entrenamiento físico, no el adecuado; él no entrenó en cuestas ni pendientes, y en alguna ocasión, en un medio maratón se había topado con varias,  ni siquiera una distancia cercana a los 20 kms había hecho, pero vaya, ni yo mismo hice siempre todo lo que debía cuando me proponía hacer una nueva carrera, sin embargo, procuré no ignorar mis debilidades para trabajar sobre ellas, y nunca dudé en preguntar a los demás corredores o al menos observarlos para ver que era lo que yo estaba dejando de hacer o mejor dicho "lo que nunca hacía".



Caso #2

Este me pasó a mi. Vivir en Tijuana es correr ligeramente arriba del nivel del mar, y en septiembre del 2012 correría el maratón de la Ciudad de México. Yo iba muy feliz, supuestamente muy bien entrenado, había hecho carreras de ritmos rápidos, repeticiones, varias largas tiradas, me sentía fuerte y ya se han de imaginar lo que me pasó, sí, falta de aire (oxígeno) desde el mismo arranque de la carrera, lo que me obligó a ir despacio en todo momento, parecía que pesaba diez kilos más, pero yo no sabía que me sentía así por la altura de la ciudad (2240 m.s.n.m.) pensaba que simplemente no había tenido una buena noche y que me había despertado algo desganado. Lo peor es que el malestar se iría amplificando poco a poco conforme pasaran las horas.

Los últimos kilómetros fueron un calvario, lo bueno que no hubo calambres, y en parte debido al paso lento que manejé, pero la asfixia fue agobiante hasta lograr cruzar la meta... al llegar sentí que me iba a desmayar, pues hubo que parar de golpe, solo me agarré de una valla, en cuclillas; pasaron como diez minutos para lograr sentir que controlaba la respiración y que ya no se me nublaba la vista.

La contaminación, más la altura de la ciudad trataron de impedir que llegara a la meta. No ha sido unas de mis mas gratas experiencias, al menos no en sus kilómetros finales... pero se que si no entreno al menos en terreno alto de unos 1400 metros (lugares como el Hongo o  Cóndor), ni para qué me lanzo a sufrir nada más y aquella vez no entrené en altura ni una sola vez.



Caso #3


Él quiere correr el maratón (voy a omitir su nombre) batalló y sufrió bastante el año pasado corriendo la mitad, ahora que lo he visto de nuevo me dice que está inscrito pero al maratón, claro, me emocioné con la noticia, lo felicité por su decisión peroooo, ¡oh desilusión!, dice que ya se está preparando mentalmente, sí solo mentalmente (eso cree él) porque a escasas 7 semanas para su gran reto, él no ha salido a correr ni siquiera un 10k. Dificil caso cuando casi todos los que hemos corrido un maratón sabemos que se practica con 5 o 4 meses de anticipación, y ahora éste joven cuenta con menos de 2 meses... él, está mas que decidido a enfrentar el reto.

Repito que no me gusta dar consejos sin que me los pidan, pero en éste caso y por aprecio a éste chico me sentí comprometido a darle todos los consejos que pude en ese breve rato en que platicamos... más él aun insiste, no ha entrenado su cuerpo pero que mentalmente ya está listo.

Le dije que en el maratón todo puede pasar, y que de que puede llegar a la meta puede llegar, pero veo que subestima la distancia mas de lo que cree, pues a su edad todo parece fácil (ésto no se lo dije), y que la mente la entrenará al correr, y lo mejor será cuando haga tiradas entre 28 y 34 kms para simular el como se va a sentir en realidad en pleno maratón.
Agregué que el chiste de un evento de este tipo es que termine con ganas de querer repetirlo, de volver a correr otro, pero si solo se metió a padecer dolores y malestares no le será muy motivante la experiencia como para querer hacerlo de nuevo... ¡haz distancias largas cuanto antes amigo! fue lo que mencioné al final de la charla.

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El punto de todo esto es que a veces creemos estar preparados, y a veces nos dan consejos pero no los tomamos, pensamos en que tal cosa no nos va a pasar a nosotros, que vamos a tener mejor suerte.

Entrenar la mente no es "hacerse a la idea" mientras estás sentado en el sillón soñando con terminar la distancia, ¿será que no comprendemos algunas frases?, "Si lo puedes soñar, lo puedes lograr", sí pero en nuestro caso, como corredores soñamos mientras entrenamos, solo así es factible el logro de determinada meta. El cuerpo será el móvil para llegar y la mente deberá estar fortalecida para empujar al cuerpo a conseguir ese sueño... de otro modo el sueño se podría esfumar en algún punto del recorrido, el bonito sueño que tuviste se podría tornar en pesadilla.

Puede ser que falte entrenar al cuerpo y la mente como es debido, entrenar tu cuerpo con lo que sabes que te hace falta, como me sucedió a mi, o bien que ambas partes no has entrenado, ni cuerpo ni la mente, y parece que te quieres lanzar al "matadero" como un auto-castigo en vez de premiarte con una bonita experiencia... ir a la guerra sin fusil jamás será un buena idea.

Lo ideal es que cruces la línea de meta, cansado sin duda, tal vez dolorido, con ganas de tirarte al suelo, pero con la satisfacción de que también disfrutaste el recorrido, el esfuerzo, el logro de haber llegado para que sea la satisfacción mucho mayor que cualquier malestar físico que en pocos días se te quitará, pero esa sensación de logro y de orgullo se quedará contigo para siempre, y hasta te habrá alimentado las ganas de querer repetir la experiencia.




10 comentarios:

  1. que tal Hector. definitivamente para el maraton se necesita estar muy fuerte en estos dos aspectos, el fisico y el mental, uno solo no te garantiza el realizar un buen papel y quien sabe terminarlo. me gustaria leer la historia de esta persona despues del maraton. que sucedera?
    saludos Hetor, ya estaria bien un condorazo no crees?

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    1. Sí Víctor, tienes razón, aunque parezca que van de la mano no siempre es así, ejemplo: pude haber entrenado mucho y haber hecho varias largas distancias para el maratón de S.D. pero si no hubiera entrenado cuestas de poco me hubieran valido esas horas de duro entrenamiento, no es lo mismo imaginar que las subo, a realmente subirlas, por eso me traicionaba la mente en éste mismo maratón en el 2013, nada me habia preparado para la cuesta mas larga de todas, la de 3 kms.

      Definitivo, yo también quiero saber como le va a éste chico en su primer maratón, tal vez lo acompañe a trote en sus últimos 10 kms. aunque no se lo he dicho... y falta a ver que temperatura les toca en pleno verano, ha muchos les ha dado el famoso golpe de calor.

      Condor, sí, cóndor quiero, hay que ir!!

      Gracias por comentar amigo, saludos!

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  2. Íjole, un compañero de equipo así le hace, después de 4 meses sin actividad se avienta el maratón de Tijuana :S pero parece que ya agarró la onda y está preparándose bien para este julio después de años de hacer lo mismo.
    En lo personal de repente me salen sorpresas como lo que te tocó en el D.F. Mi primera vez entrenando allá solo aguanté unos 3 kms en Chapultepec, ya en ocasiones posteriores sí pude aguantar 10 o más pero si me fijo de meta ir a un maratón allá, definitivamente seguiré los consejos (solicitados o no) de ir a hacer distancia al Cóndor.
    Te voy a decir de mi primer carrera. Llevaba varias semanas entrenando en el tartán, y después de mucha monotonía (no se porque no me animaba a dar vueltas en el circuito exterior, de tierra, de unos 900 metros) decidí aventarme al asfalto, simplemente siguiendo la premisa de que la carrera para la que estaba entrenando sería en las calles. A partir de aquí, todas las carreras las mentalizo preparándome para las circunstancias. Si tendrá subidas (Ensenada, La Enchilada) me voy a donde encuentre subidas, si es distancia larga, hago corridas largas los fines de semana, si es en montaña hago cerros y cerros. Esto no evita las sorpresas que a veces te pueden tocar, y creéme que he aprendido muy dolorosamente que cada carrera es única, un sinfín de factores son los que confabulan a favor o en contra. De hecho es un poquito el tema de mi próximo post en mi blog, jeje, luego te platico.
    No se si te pasa como a mí, que te tocan personalidades muy distintas a quienes contarles de técnicas o tips para correr. No se, como que pre-juzgo a veces si nomás me están preguntando para chorearme y no me abro tanto, y a veces alcanzo a leer que sí están genuinamente interesados y sí les aviento el show completo. Lo que sí, es bien de cuidado dar consejos no solicitados, nunca sabe uno que tan experimentado es el otro y quizás se pueda ofender jeje, supongo que al final de cuentas ganamos todos en el intercambio de ideas e información.

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  3. Aah que tu amigo, por eso a algunos corredores les dicen masoquistas, jejeje, lo bueno que como mencionas, él ya agarró la onda.

    Y fíjate amigo Gabo que cada año un buen tocayo del D.F. me hace el favor de inscribirme, es decir me regala la inscripción de la Ciudad de México y siempre me quedo entre el miedito de volver a pasar por eso y que ando pobretón para el viaje, tan bonita la ciudad y tanto que me faltó por conocer; puede que vuelva para sacarme la espinita y tratar de hacer bien el maratón.

    Haces lo correcto, te mentalizas y a la vez te preparas para enfrentar las condiciones con las que te toparás en las carreras, y es cierto cada una aunque la vuelvas a correr es única, siempre hay algún factor que afecta por muy bien que te hayas entrenado.
    Luego nos compartes lo que escribirás en tu blog, con gusto lo leeré mi estimado Berrendo Runner!

    Si, desde luego que me toca platicar a veces con gente de todo tipo, y yo algo incrédulo me reservo pues no se si solo me estan poniendo a prueba a ver si en verdad se algo del running, pero también me ha pasado, que si noto que existe un interés genuino entonces si me desplayo con el tema, que con tantita cuerda no paro de hablar de kilómetros, jajaja, mas si veo que la persona solo tocaba el tema por compromiso mejor le doy lo que necesita en su breve curiosidad, una corta respuesta.

    Por supuesto que sí, todos ganamos con el intercambio de experiencias e información, afortunadamente la mayoría sabe compartir y con gusto lo hace, es parte de lo bonito de este deporte, que hay muy pocos corredores con envidia o egoísmo.

    Gracias Gabo!

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  4. Gracias, Héctor, esto es lo que necesitaba leer; muy buen tema y excelente redacción. Gracias campeón.

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    1. Saludos mi buen amigo Polo, me alegra que le haya gustado o servido ésta entrada!

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  5. Que buen tema Héctor, definitivamente, el primer paso para correr un maratón es respetar la distancia. La mente se entrena durante el entrenamiento y aunque la motivación es importante, en realidad, el entrenamiento mental consiste en "enseñar" a nuestro cerebro a soportar la distancia. Y hablando de consejos no pedidos... Recomiendo explorar el término "teleoanticipación" saludos Héctor.

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    1. Super Runner Marco! gracias, ya me puse a leer sobre ese término, no lo conocía, al inicio me pareció complejo, pues varias fuentes lo definen de forma un poco diferente, pero al final comprendí de que se trata.

      De acuerdo, si no se respeta la distancia de maratón la experiencia puede resultar desastrosa.
      Aprovecho para felicitarte por la nota donde saliste en Yo también corro en Tijuana, me inspiró mucho el leerte, increíble que con tan poco tiempo que llevas de corredor, solo dos maratones y ya hasta calificaste a Boston, todo ello posible debido a tu enfoque, dedicación y disciplina, no dejes de aprovechar todo ese talento!

      Saludos

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  6. Hola Héctor. Muchas gracias! Me da gusto que mi historia te haya inspirado. Me gustaría motivar a muchos más a atreverse a hacer lo que nadie o muy pocos han hecho para ser sobresalientes, te imaginas lo que pasaría? Saludos.

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  7. Sí que me lo puedo imaginar mi estimado Marco! Espero que muchos hayan leído tu historia, que aunque es breve es fructífera, resultado de un gran esfuerzo y dedicación. A veces me pregunto ¿cuanta gente que no corre tendrá la capacidad de ser un excelente corredor y no lo sabe porque no lo intenta?
    Saludos!

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